Por Lucero Torres Nava
Seguro que recuerdas que en nuestro artículo anterior nos planteamos la pregunta de cómo afectan los residuos plásticos a nuestra salud. Y he de confesarte que, al preparar el material para estos dos artículos, ¡no dejo de salir de mi asombro!, pues, como pudimos ver en al artículo anterior, son una gran cantidad de alteraciones las que causan los disruptores endócrinos o las también llamadas, «hormonas impostoras» (¡recuerdas este nombre tan raro!), que a través de los plásticos se transfieren nuestro cuerpo o a nuestros alimentos. Los plásticos afectan nuestra salud reproductiva, hormonal y son un factor causal más en el desarrollo de enfermedades autoimmunes y distintos tipos de cáncer.
«¿Qué hacer, entonces?» Porque la idea no es caer en un fatalismo extremo, ni en una paranoia sin sentido. ¡Hay que tomar acciones!, y existen muchas cosas que podemos comenzar a hacer hoy mismo. Así que sigue leyendo, porque aquí te daré 10 recomendaciones para prevenir y disminuir los efectos que el uso de plásticos tiene en nuestra salud.
1. Dile «¡NO!» a los plásticos de un solo uso:
- Hazte al hábito de llevar al supermercado bolsas de yute, manta o cestos para contener y transportar tus alimentos y productos.
- Prefiere alimentos que estén contenidos en vidrio, papel o tela. También puedes comprar alimentos a granel, asegurándote (o exigiendo) el manejo higiénico de los mismos en la tienda o el supermercado.
- Bebe agua de filtro o que esté contenida en vidrio. Y para transportar éste líquido vital, utiliza contenedores de acero inoxidable o titanio.
- Consume alimentos que estén contenidos en un solo empaque y no empaquetados individualmente, pues en este último caso, se generan mucho más desechos plásticos.
2. Reutiliza en tu cocina TODO lo que puedas los materiales plásticos y, si debes desecharlos, hazlo en el lugar correcto
- Por principio, ¡hay dejar de comprar recipientes de plástico para nuestra cocina!
- En segundo lugar, puede escucharse un tanto extremo, pero por tu salud y la de tu familia, ¡¡desecha de forma apropiada los utensilios de plástico que no contengan las leyendas: «Libres de Ftalatos» y/o «Libres de Bisfenol A»!
- Los utensilios de plástico libres de Ftalatos y/o libres de Bisfenol A, puedes seguir utilizándolos, pero cuida de que no estén en contacto con alimentos preparados.
- Al utilizar el microondas, ¡recuerda que nunca debes calentar alimentos en contenedores plásticos!, pues a su paso por el plástico contenedor, las ondas microondas transfieren sustancias tóxicas a los alimentos.
- Finalmente, cuida de no someter los utensilios de plástico a cambios de temperatura calor/frío

3. Opta por hacer algunos cambios en tus utensilios de cocina
- Para contener los alimentos utiliza recipientes de cristal, de titanio o de acero inoxidable. Actualmente ya existen estas opciones y, además de no causar un daño a nuestra salud y a nuestro ambiente, ¡son mucho más durables!
- Para envolver alimentos utiliza tela con cera de abejas o papel. También puedes utilizar bolsas de algodón, que son excelentes alternativas al tradicional uso del film plástico.
- Utiliza pajillas (popotes) de bambú.
- Y, en lugar de utensilio desechables opta por platos, cubiertos y charolas fabricados con materiales ecológicos como madera o bambú.

4. Cuida los utensilios que utilizas para la alimentación de los niños
Los niños son lo más susceptibles a estar en contacto con disruptores hormonales durante mayor tiempo, por ello:
- Utiliza biberones de cristal o de acero inoxidable.
- Utiliza platos y vasos de cristal. Y si requieres una opción irrompible que sea más segura para los niños, opta por el uso de platos y vasos de bambú o madera.
- Evita los juguetes de plástico que tus hijos se puedan llevar a la boca.

5. Cuida que tus productos de higiene personal no dañen tu salud, ni generen más daño al ambiente
- No existe ninguna ley que haya decretado que los cepillos de dientes deban ser plástico. Pueden ser de madera y fabricados con fibras naturales, ¡así que busca y prefiere estas opciones!
- Procura utilizar pañales, compresas y tampones que sean compostables y biodegradables.
- Si utilizas bastoncillos de oídos, actualmente puedes adquirirlos fabricados con bambú.
- Procura evitar las maquinillas de afeitar desechables, pues puedes conseguirlas de acero inoxidable y sólo remplazar las hojas de afeitar periódicamente.
- En cuanto al uso de jabones y otros productos de limpieza corporal, un primer paso sería utilizar jabones en lugar de geles o shampoo, pues de esta forma evitarás el uso de una gran cantidad de botellas de plástico.
- Elegir productos que estén contenidos en cristal, sería un segundo paso.
- Sin embargo, utilizar jabones y otros productos de limpieza corporal ecológicos es, sin duda, el paso más importante, pues además de que estos productos estarán contenidos en recipientes igualmente ecológicos, con su uso evitarás que tu cuerpo entre en contacto con sustancias tóxicas contenidas en los productos más comunes de mercado.
- ¡Y lo mismo aplica para los productos cosméticos que utilizas!, pues con el uso de cosméticos ecológicos evitarás el daño a tu piel, a tu salud y al medio ambiente.
6. En la limpieza de tu casa, ¡considera otras opciones…!
- Utiliza nueces de lavado, limón, bicarbonato y vinagre, pues estos productos puede ser el mejor aliado en la limpieza del hogar y con su uso evitaras desechar una gran cantidad de plásticos. Además, contribuirás a reducir la producción de sustancias químicas que mantienen micro esferas en el medio ambiente.
7. Vanidad de vanidades…, pero, ¡pon atención al momento de comprar tu ropa!
- Antes de comprar ropa, date un tiempo para reflexionar y piensa, ¿realmente la necesito?, pues en la producción, distribución y desecho de ropa se genera una gran cantidad de residuos, entre ellos, residuos plásticos.
- Por otra parte, recuerda que la calidad (y no necesariamente el precio o la marca) es sinónimo de durabilidad, así que una buena prenda de vestir te evitará estar desechando productos de mala calidad.
- ¡Ojo!: ¡evita las microfibras que se desprenden de tejidos sintéticos al lavarlos.
- Prefiere tejidos orgánicos y/o certificados (que en su etiqueta señalen que no contienen fibras dañinas), pues de esta forma tendrás la seguridad de estar usando ropa que no dañará ni tu piel, ni tu salud.

8. El uso del vehículo también cuenta
Los neumáticos se desgastan al conducir y los micro plásticos que se eliminan terminan en el mar y en la tierra. Pero esto es sólo la «punta de iceberg», pues todos los productos y procesos que se utilizan en la fabricación y mantenimiento de los autos generan una gran cantidad de contaminación y desechos plásticos, por lo que también podemos poner nuestro «granito de arena» evitando el uso excesivo del automóvil.
- Camina en lugar de usar el vehículo en trayectos cortos
- Utiliza el transporte publico
- Comparte el vehículo
- Utiliza la bicicleta (¡es un ejercicio muy completo!)
- Y al conducir, siempre circula con la presión adecuada de los neumáticos y evita maniobras bruscas, pues así reducirás el desgaste. Además, checa los niveles y dale manteniendo periódico a tu automóvil, pues esto reduce de manera muy importante el consumo de combustible y lubricantes.
9. ¡Haz equipo con tu comunidad!
- Toma un papel activo y súmate a campañas que promuevan opciones alternativas al uso del plástico
- Súmate a recogidas de desechos en entornos naturales
- Con tus practicas en la vida cotidiana, invita a otros a evitar en TODO lo posible el uso de plásticos y promueve que los plásticos se desechen de manera correcta (¡y no lanzándolos por la ventanilla del auto!)
- Y si, en algún momento, no hay más remedio que usar plásticos…, ¡promueve el uso de bioplásticos, plásticos reciclables o plásticos compostables!
10. Finalmente…, ¡recuerda que los pequeños cambios hacen una gran diferencia!
Es un hecho, ¡no podemos dejar de utilizar el plástico al 100%!, pero podemos comenzar con pequeñas acciones que repercutirán en el cuidado de nuestra salud y de nuestro medio ambiente. Cada día, cada uno de nosotros puede hacer algo que marque una diferencia. ¡Aquí te presento muchas opciones para que TÚ elijas por dónde comenzar y seguir desarrollando «hábitos para disfrutar la vida»!